Introducción
¡Hola! Mi nombre es Ben Miller, diseñador de juegos de Guild Wars 2. Mientras Eric y Colin han estado ocupados escribiendo blogs y entrevistas, hemos estado trabajando en un pequeño sistema llamado rasgos. Ha habido cierta especulación y preguntas acerca de los rasgos en los foros. ¿Qué son los rasgos? ¿Cómo los reúnes? ¿Tiene Colin Johanson un rancho de Moa’s al este de Washington en secreto como un frente para la Orden de los Susurros? Voy a responder a dos de esas tres preguntas y dejar al descubierto la tercera para su futura elaboración.
¿Qué son los Ragos?
A nivel básico, los rasgos te vuelven mejor en aquello que elijas hacer. Tu seleccionas unos rasgos para modificar habilidades y atributos. Una vez que has dominado un puñado de rasgos estos se vuelven un componente clave en la creación general de tu build.
Dominando los Rasgos
Entonces, ¿Cómo consigo todos esos rasgos para hacerme una build? Buena pregunta.
Tu adquieres los rasgos completando desafíos de profesión repartidos por todo el mundo. Por ejemplo, entras a una posada y persuades a un extranjero sombrío para que te hable sobre el rumor de un misterioso tomo lleno de conocimiento arcano. O bien retas a un legendario espadachín a un duelo mientras exploras “Toque de la Divinidad”.
Cada profesión se centra en las diferentes actividades para desarrollar sus rasgos. Un guerrero entrena físicamente, golpea, come o bebe cosas. Los elementalistas, por el contrario, buscan el conocimiento ancestral encerrado en tomos o sitios elementales particularmente poderosos. Los diferentes retos acentúan la sensación única de cada profesión y realmente dan vida a la experiencia de jugar con esa profesión.
Tu destreza crecerá a medida que completes los retos que desarrollan los rasgos particulares de tu personaje. Los maestros de la espada que derrotes te enseñarán antiguas técnicas, permitiéndote seleccionar el rasgo de maestria con la espada. Descubrir el tomo misterioso te permitirá descubrir los secretos de la energía mágica.
Construyendo con Rasgos
Las builds son una de las cosas que hacen a Guild Wars único, y es algo que estamos llevando más allá en Guild Wars 2. Para esos no familiarizados con las builds, son combinaciones de rasgos, habilidades y atributos que funcionan bien juntos. Con alrededor de 100 rasgos para cada profesión, hay más rasgos en el juego de los que podrías equipar en un único personaje, así que tienes que tomar decisiones y elegir ciertos rasgos por encima de otros.
Los Rasgos juegan un rol importante a la hora de permitirte personalizar la forma de jugar de tu personaje
Cada profesión tiene su propio conjunto de líneas de rasgo. Son similares a las líneas de atributo por profesión del Guild Wars original. Cada línea de rasgos tiene un mayor o menor número de opciones. Los guerreros, en este momento, tienen dos líneas generales llamadas Poder y Táctica así como líneas para cada una de las armas que pueden manejar. Cuando dominas rasgos, puedes introducirlos en esas líneas, afectando a tu personaje.
Anteriormente hemos hablado del sistema de habilidades de Guild Wars 2 y de cómo tu podías hacer tus elecciones sobre la habilidad de curación, la habilidad de élite y las habilidades de utilidad. Ya es hora de introducir los rasgos en la mezcla. Hay un ejemplo específico de un guerrero de alto nivel creando una build.
Para darle un contexto, finjamos que un evento ha empezado. Un jabalí gigante esta merodeando por el bosque y tu grupo decide encargarse. Esta build está destinada a maximizar el daño que tú y tus compañeros de equipo podéis liberar contra un único objetivo.
Paso 1: Elige tu arma. El arma que estés manejando en el momento es el factor principal que determina la forma en que tu personaje va a jugar. Vamos a coger una espada, un arma versátil que viene de serie con una cadena de tres habilidades (Cortar arteria, Corte profundo y Estocada final), una repetitiva de tipo rápido que ataca en un área pequeña (Ráfaga) y una habilidad persecutoria que reduce la distancia entre el enemigo y tú (Tajo salvaje). Para mi arma secundaria podría coger un cuerno de guerra para echar buffs de daño, pero la voy a cubrir con mis habilidades de utilidad. En su lugar, cogeré una segunda espada para maximizar mi propio daño. En la práctica, tú también elegirás tu arma alternativa para cambiarla en combate – tal vez un arco para la distancia.
Paso 2: Elige una habilidad de curación. Vamos a ir con una curación básica como Oleada sanadora, que da tanto salud como adrenalina cuando se usa. La adrenalina te da bonificaciones de daño y te permiten usar las habilidades de estallido más a menudo, así que es perfecta para nuestra build.
Paso 3: Escoge tus habilidades de utilidad y tu habilidad de élite. Eliges A Mi Marca (que disminuye la armadura del enemigo y atrae a un enemigo, Por La Justicia (que da a los aliados la Bendición de Furia y la Bendición de Poder) y Frenesí (que incrementa la adrenalina que ganas). Por habilidad de élite me pondré la siempre épica Estandarte de Batalla (que otorga una serie de poderosos buffs a tus aliados).
Paso 4: Asigna tus rasgos. Aquí puedes empezar a centrar tu estilo de juego y a ser listo a la hora de introducir algo en cada línea de rasgos.
Potencia: Escojamos acumular rasgos que aumentan tu atributo de fuerza para que tus ataques cuerpo a cuerpo individuales hagan más daño.
Táctica: Mientras te las ves con el jabalí gigante, intercambiar armas más rápido seguramente sería impresionante, así que te equipas el rasgo Maestro de Armas para disminuir la recarga del intercambio de armas. También te equipas rasgos que aumentan el número de objetivos a los que afectan tus gritos, y aumenta la duración de tus Estandartes.
Espada: Decides ponerte Maestría con la espada para aumentar aún más el daño que hacen, así como el rasgo que aumenta la probabilidad de asestar un golpe critico con Estocada Final.
Arco largo: Al margen de lo que está disponible vamos a mantener las cosas simples, más daño.
Queremos que experimentar con rasgos sea divertido y atractivo, por lo que hemos hecho las reglas de manera que cambiar los rasgos sea extremadamente flexible. Sin coste alguno en el juego, puedes cambiarlos a voluntad, siempre fuera del combate. Esto significa que eres libre de experimentar para ver lo que funciona y lo que no sobre la marcha, sin tener que volver a la ciudad o preocuparte de si tienes suficiente oro.
Se trate de aventuras, de caminar por Tyria tratando de detener a los dragones o de luchar contra otros jugadores en PvP Mundo vs Mundo – el sistema de rasgos esta ahí para experimentar, divertirte con él y permitir que te sientas como si estuvieras dominando activamente la profesión que has elegido. Como Guild Wars, hay incontables combinaciones inteligentes y únicas que encontrar.
Para todos los aspirantes a héroe que andéis ahí: salir y aventuraros, y usar el poder de los rasgos no para el bien o para el mal, sino para hacer lo increíble.
Mantente atento – en las próximas semanas vamos a ocuparnos de cosas como los logros, la armadura, el equipo… y quizás incluso hacer que Colin hable sobre su rancho secreto de Moa´s.